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«s.t.a.r.c.a.r.» Javier Adrada de la Torre *

No, not comfortable but home
Gloria Anzaldúa

Con el último rayo del día
asoma en el horizonte la silueta
de una gasolinera

hemos llegado tan lejos
y tan solo
para volver sobre nuestros pasos
hemos encontrado lo que
no sabíamos que buscábamos
y hoy regresamos con las manos llenas
de respuestas vacías
pero un poco menos enfermos

me gustan las gasolineras porque
nadie viene para quedarse forty-one
dollars at number five son el símbolo
de todo lo que llega y todo lo que
se marcha i knew you would
come back menos este hombre
que aquí trabaja y cada día and i knew
you would still be here contempla
historias que se detienen fugazmente
frente a los surtidores

este hombre que aquí trabaja
ahora me está mirando y se imagina
los mundos que habré visto desde aquel
último amanecer que pasé por este sitio
hace 129 días

seguro se imagina una larga travesía
por inhóspitos pinares y arcedos
y por valles y montañas y lagos
congelados y por una interminable
carretera y por ciudades
de nombres sagrados que tan solo
ha visto en internet y por pieles
de cuerpos extraños y por otras
viejas gasolineras donde
nadie
llega para quedarse

ojalá habitar su fantasía
pero yo me quedo con estos
caminos de hierro con nombres de pájaro
y con el recuerdo de mi noble
s.t.a.r.c.a.r.
una flecha negra hacia la muerte
(oh a ti te deberemos nuestra apocalipsis)

no era mi intención
vomitar en verso libre sobre tus zapatos
pero no siempre controlo mi garganta
cerró los ojos antes de marcharse:
torres de espanto
y sin embargo

Con las primeras
sombras de la noche y con el viento frío
de una estación que ya no era la misma
tuvo la insoportable certidumbre
de que en el mundo no hay hogares

solo gasolineras

«s.t.a.r.c.a.r.» Javier Adrada de la Torre.

* Este poema forma parte de Gasolineras, obra ganadora del XXII Certamen Internacional de Poesía Joven ‘Martín García Ramos’ (organizado por el Ayuntamiento de Albox), cuya publicación está prevista para finales de año por la editorial Difácil.